Paula López Caballero
Ariadna Acevedo Rodrigo
Beyond Alterity: Destabilizing the Indigenous Other in Mexico
Año: 2018
Editorial: University of Arizona, Estados Unidos de América
ISBN: 9780816535460
Páginas: 311
El libro Más allá de la alteridad: desestabilizando al otro indígena en México es una obra que externa un interesante crisol de ideas, vertidas en las colaboraciones que configuran el libro. Desde distintas disciplinas y metodologías, más las evidencias empíricas que se presentan, estimula la reflexión con una mirada fresca y actual sobre lo que las ciencias sociales y otros campos del conocimiento entienden por indígena, así como qué características definen a la categoría y cómo son asumidas estas representaciones. Un tema que pareciera ha quedado “superado” debido a la vasta producción de textos que se han escrito en México, pero que como se puede inferir a partir de las contribuciones de la literatura hecha a esta obra (agrupada bajo el término de antropología aplicada de identificación) probablemente aún no sea así.
A lo largo de las 311 páginas que integran el texto podemos encontrar que la obra tiene como eje analítico cinco conceptos clave: alteridad, indígena, experiencias sociales, categoría y desestabilización. A partir de este andamiaje conceptual cada autor, desde sus preocupaciones particulares, enfoques y temas varios -como la tenencia de la tierra, las relaciones de propiedad, las negociaciones y las alianzas vinculadas con proyectos nacionales, la alfabetización, los usos de idiomas nacionales, la medicina, la genética y la antropología- va hilando una especie de telaraña argumentativa para la alteridad, entendida ésta como un producto de contextos políticos particulares.
La policromía que encuentro en las colaboraciones contenidas en este libro toma como casos de estudio aspectos que no son tan visibles de la alteridad, pero que, como se apunta, son igual o más constitutivos de la vida social. Este matiz me parece muy importante, permite evidenciar cómo los estudios previos han puesto énfasis en aspectos como la cosmovisión, el lenguaje, la costumbre o las resistencias; lo que ha traído como resultado que el análisis sobre este fenómeno en México no se interese en aquellos temas, en los que la alteridad no se logra percibir de manera tan obvia.
Partiendo desde esta perspectiva es posible revelar la posición crítica que esgrimen los autores, con la que buscan desafiar las posibilidades de pensar de otras maneras al fenómeno de la alteridad y sus implicaciones. Dejando al margen, o rechazando, la fascinación que provoca el exotismo y que generalmente ha guiado los estudios sobre el tema; en los capítulos de este libro se conciben como objetos de análisis (de la alteridad de los indígenas) aquellos hechos que no son tan evidentes, pero que bien podrían abonar a percibir que la categoría de indígena no es natural, sino históricamente constituida a partir de una experiencia social compartida y la interacción con el entorno no indígena a su alrededor.
Con base en las ideas previas puedo decir que la compilación de colaboraciones que dan cuerpo al texto se interesa por exponer los usos y los contextos sociales en los que las categorías identificatorias, como la de indígena, adquieren significado, sin la intención de producir una narración lineal que reconstruiría la historia de los indios, desde la conquista hasta el presente, y de los valores asociados con la indigeneidad (raza, idioma, etnia, etcétera).
Esta contribución del libro queda manifiesta a lo largo de sus 11 capítulos, pues el análisis que presentan va más allá de la alteridad, concibiendo la singularidad de los grupos indígenas como resultado de las articulaciones entre gobierno, sujetos, conocimientos, y no como la conservación de propiedades fijas.
Esto queda expresado en la estructura del texto, la cual fue concebida en dos secciones: la primera titulada Tierra y Gobierno, y la segunda Ciencia. La sección inicial del libro está integrada por seis capítulos1. La particularidad que guardan estos trabajos es que abordan específicamente aspectos relacionados con algunas experiencias sociales que, por sus características, han quedado fuera de lo que se entiende por alteridad y, por lo tanto, al margen de su análisis. Sólo por mencionar un ejemplo de manera muy general, el texto de Emilio Kourí titulado: Las prácticas de tenencia de tierras comunales: Relaciones de propiedad de Pueblos Indios en el México Colonial, expone una serie de evidencias sobre las distintas formas de propiedad de la tierra que existían en la Colonia, llegando a identificar que la distribución y el uso por parte de las Repúblicas de Indios, en la Nueva España, eran jerárquicas y desiguales, ya sea “por hechos” o “por derechos” de propiedad privada. Por lo tanto, Kourí considera que es un error concluir, a partir de los elementos que expone, que la autonomía política de los Pueblos Indios y de su solidaridad frente a las amenazas externas a la propiedad comunal eran necesariamente igualitarias y cohesivas. Proponiendo con ello que el “comunalismo”, la “cohesión” y el “espíritu de solidaridad igualitaria”, que se supone son inherentes a la cultura indígena, no son tales. Considero que este trabajo nos invita a hacer un replanteamiento sobre la manera en que hemos “querido” entender y representar elementos como la comunidad, la comunalidad, la unión y el apoyo mutuo en los estudios que se han hecho al respecto en México.
La segunda sección que lleva por título Ciencia está integrada por cinco capítulos2. Estos trabajos están pensados para lograr recuperar la historicidad de la alteridad, asociada a la categoría de indígena. De manera personal, considero que la suma de las colaboraciones en esta sección demuestra la existencia de los cambios históricos que ha tenido esta categoría. Los textos de este apartado buscan explicar los orígenes y los nuevos usos de algunos de los atributos que comúnmente se asocian como "propios" o "esenciales para los grupos indígenas". Examinan momentos históricos precisos en donde la categoría y la alteridad, supuestamente intrínseca a ella, se estabilizan.
Por ejemplo, el trabajo de López Caballero titulado: Debates antropológicos en torno al tema y la Alteridad indígena, 1940 – 1948, nos coloca frente a un momento histórico crucial para el establecimiento del proyecto de Nación en México y retoma para esa época una de las controversias que se presentaban en las principales revistas académicas -se enfoca principalmente en algunos artículos de la revista América Indígena- y en la cual se debatían, entre antropólogos indigenistas mexicanos y extranjeros, como tema central dos cosas: quién era indígena y cómo debería definirse la categoría. Este capítulo parte de un enfoque sociohistórico de las categorías de identificación y señala que el período de 1940 a 1948 fue un momento clave, en el que se institucionalizó y profesionalizó la antropología mexicana, acompañada al mismo tiempo de la lenta consolidación de una política indigenista oficial, en un período importante para el fortalecimiento de un concepto del indio, mismo que ha permanecido hasta la actualidad.
Como se puede ver en esta reseña, los temas que se abordan en este libro son una propuesta diferente a los que la antropología, particularmente, ha retomado para establecer una explicación sobre el fenómeno de la alteridad. Cumpliendo de esta manera con el objetivo de desestabilizar la categoría que se ha naturalizado como parte consustancial de este fenómeno (el indígena). En resumen, considero que el libro Más allá de la alteridad: desestabilizando al otro indígena en México es una contribución importante que sigue un camino que escasamente se ha recorrido, desde el enfoque que supone el ir más allá de la alteridad podría resultar de gran polémica, pero es al mismo tiempo enriquecedor porque ofrece una mirada diferente sobre la misma y los procesos que intervienen en ella.
Considero que debido a la importancia y, sobre todo, la relevancia que tiene la obra para el quehacer de las ciencias sociales en torno al análisis de los fenómenos de la alteridad, este texto debería ser traducido al español, permitiendo con ello colocarlo al alcance de un mayor número de interesados en el tema.
Notas
Las prácticas de tenencia de tierras comunales: relaciones de propiedad de Pueblos Indios en México Colonial, de Emilio Kourí.
Comunidades conectadas: aldeanos y sistemas sociales amplios en los períodos colonial tardío y nacional temprano, de Peter Guardino.
Comunidades indígenas, transformaciones políticas y la guerra de independencia de México en la región de la costa del Golfo, de Michael T. Ducey.
¿Felices juntos? “indios”, Liberalismo y Escuelas en las Sierras de Oaxaca y Puebla, 1876 –, de Ariadna Acevedo-Rodrigo.
Todos tenemos la crisma de Dios: participación de la alfabetización en español en Tlaxcalan Pueblo, de Elsie Rockwell.
La tenencia de tierras comunales e indígenas en Yucatán contemporáneo: rastreo de las cambiantes relaciones de propiedad en el ejido posrevolucionario, de Gabriela Torres- Mazuera.
De la Colección Anatómica al Museo Nacional, alrededor de 1895: Cómo las calaveras y las pelvis femeninas comenzaron a hablar el lenguaje de la historia nacional mexicana, de Laura Cházaro.
Debates antropológicos en torno al tema indígena y la alteridad, 1940 – 1948, de Paula López Caballero.
Desplazamiento, desarrollo y la creación de un Indígena moderno en el Papaloapan, 1940 –, de Diana Lynn Schwartz.
Historia Encapsulada: Evon Vogt y la Creación Antropológica de los Mayas, de José Luis Escalona Victoria.
En enfermedad y en mito: avatares genéticos de la alteridad indígena y la nación mexicana, de Vivette García Deister.